Los niños pueden enfermarse más que los adultos porque sus sistemas inmunológicos no están completamente desarrollados y los entornos de la primera infancia pueden tener muchos gérmenes. Los gérmenes pueden propagarse fácilmente cuando los niños juegan unos cerca de otros, tocan muchos objetos y superficies mientras exploran, comparten juguetes y se llevan cosas a la boca. Es común que los niños tengan de seis a ocho resfriados al año.
Otras afecciones comunes de salud infantil que no se propagan por gérmenes son las alergias, los problemas de la piel, las afecciones oculares, los problemas neurológicos y las afecciones gastrointestinales. Los programas deben entender qué afecciones afectan a ciertos grupos de edad y encontrar la mejor forma de promover una buena salud.
Los programas Head Start pueden ayudar a reducir la propagación de enfermedades infantiles enseñando a los niños buenas prácticas de higiene, completando los controles de salud diarios y sabiendo cuándo enviar a los niños a casa para evitar la propagación de una enfermedad. La tabla de signos y síntomas de Caring for Our Children (El cuidado de nuestros niños) (en inglés) brinda orientación sobre esto. Esta tabla ayuda a los programas a comprender los síntomas de una enfermedad, cuándo informar a las familias y cuánto tiempo deben quedarse los niños en casa cuando están enfermos.
Consejos y estrategias para prevenir enfermedades infantiles comunes en los programas Head Start
- Crear una política y pasos para manejar las enfermedades infantiles comunes.
- Consulte el capítulo sobre el control de infecciones.
Más información
- HealthyChildren.org
- KidsHealth (en inglés)
- Información para padres sobre enfermedades y afecciones
