La proporción adulto:niño está estrechamente relacionada con los grupos pequeños. (Consulte 45 CFR §1302.21(b)(1)-(2) y 45 CFR§1302.23(b)(1)-(4).) Los estudios demuestran que una baja proporción adulto:niño y los grupos pequeños "están constantemente correlacionados con unas interacciones más frecuentes, más lúdicas y más cálidas entre adultos y niños, unas interacciones más positivas entre los niños, mejores entornos generales para el aprendizaje y mejores resultados para los niños".[2]
Tenga en cuenta que un número pequeño de casos les permite a los visitadores del hogar centrar la atención y los servicios e individualizar la planificación de las visitas al hogar para cada niño y familia (45 CFR §1302.22(b)).
